Juan Roberto Meléndez-Colón estuvo encarcelado 17 años, ocho meses y un día por un crimen que no cometió.
El estado de Florida lo tenía en la lista de condenados a muerte hasta que en 2002 el verdadero asesino del crimen que se le imputaba a Meléndez-Colón confesó de los hechos y se pudo comproban su inocencia. Las pruebas presentadas durante el juicio no probaban se forma contundente su presencia física en el lugar del crimen.
Meléndez-Colón viaja con otras 14 personas que han sido exoneradas de la pena de muerte después de demostrarse que eran inocentes.