JLo y yo

0
1226

Jennifer López y yo somos bastante parecidas… aunque la “You Tube personality” Kat Lazo se empeñe en lo contrario.

Lazo, encuestó a viandantes neoyorquinos y les preguntó cuál era, en su opinión, la diferencia entre latinos e hispanos: “Se es latino por haber nacido en algún país de América Latina mientras que, se es hispano por hablar español”. Por tanto, JL y yo somos diferentes.

Como lo de estar en un diagrama de Venn diferente al de JLo no me convencía, con un ánimo similar al de los mexicanos al oír hablar de Trump, decidí entrar en la biblioteca – obviada por Lazo– y buscar argumentos más convincentes.

Resulta que a la mitad de las personas encuestadas por Pew Research Center les daba exactamente igual que les llamasen latinos o hispanos y es más, dos frente a uno preferían que les llamasen hispanos. En Texas además los hispano-texanos, prefieren ser llamados hispanos y sólo un 8% prefiere ser llamado latino.

Todo comenzó cuando US Census adoptó antes de los setenta el término “hispano” para contar a los inmigrantes de México, Cuba, y Puerto Rico. Al resto de comunidades de Latinoamérica les contaban por su nacionalidad y por el área donde vivieran en los Estados Unidos. Con posterioridad, activistas reivindicaron una categoría nacional que incluyese todas las nacionalidades. Así el término “hispano” fue introducido para todos ellos en el US Census, y los medios comenzaron a usarlo.

Como en este país se vive deprisa y hay que abreviar, se adoptó el término “latino” como abreviatura de “latinoamericano”. Pero ahí es donde entra en juego la Vieja Europa invadida durante muchos años por Roma, algo que nos hizo “latinos”, al hablar una lengua, español, que es una de las lenguas derivadas del latín.

No me preocupa tanto, el hecho de que alguien me considere diferente a JLo, como el hecho de que en un mundo global, alguien pretenda separar a los hispanohablantes. Ahí es donde entran en juego los japoneses, que no son ni latinos, ni hispanos pero sí muy inteligentes y que están impulsando en sus escuelas el “Futojino henko” (“Cambio valiente”), un sistema de enseñanza desde la infancia, que educa a los niños como ciudadanos del mundo aceptando las diferentes culturas de cada país pero con unos horizontes globales (no nacionales). Ningún país es superior o inferior a otro por el hecho de que nosotros hayamos o no nacido en ese país.

Me siento identificada con esta concepción de ciudadanos globales y políglotas y creo que JLo también. Así que, Lazo puede decir lo que quiera, que muchísimos más pensamos que JLo y yo somos latinas, hispanas, políglotas y como lo de la ciudadanía global se consolide, también seremos … ¡japonesas! .