Cuando el gobernador Carney reunió todas las modificaciones de su orden de estado de emergencia y las puso en un nuevo documento, agregó lo siguiente:
“Una reunión en el interior de una residencia privada de más de 10 personas que no residan en esa propiedad será considerada reunión en espacio interior abierto al público para los propósitos de esta Orden”.
La nueva regla llega el fin de semana del Día del Trabajo con las últimas fiestas y comidas al aire libre del verano.
Como ya dimos cuenta en esta misma web de HOY en Delaware, esta orden apareció el jueves 3 de septiembre, cuando Carney emitió un comunicado de prensa diciendo que había firmado la 27ª modificación de su estado de emergencia, combinando todas las restricciones activas de COVID-19 en una sola orden, creando una Orden Ejecutiva Ómnibus.
La modificación también formalizó la reapertura del servicio de bares en las comunidades de playa de Delaware y requirió a las empresas para que apliquen más estrictamente los requisitos de cobertura facial entre sus empleados.
La nueva adición, en la sección sobre cubiertas faciales, esencialmente requiere que los propietarios e invitados sigan los mismos protocolos que los restaurantes y otros lugares públicos: usar mascarillas a menos que coman, pero asegurándose de que las cubiertas faciales estén puestas si se está la persona moviendo.
“Se trata de hacerles saber a las personas que deberían usar mascarillas y distanciarse socialmente cuando estén cerca de personas fuera de su hogar”, se dijo desde la portavocía del gobernador.
La adición por tanto le da al estado algunos poderes de aplicación sobre las fiestas en casa.
El objetivo específico es apuntar al tipo de reuniones que conducen a brotes.
En Newark, el Ayuntamiento votó la semana pasada para limitar las reuniones privadas a 12 adultos en una casa y 20 fuera de la casa, incluido el propietario.
