Los casos nuevos de COVID-19 en Delaware han aumentado a razón de 241 por día de promedio en los últimos siete días.
A nivel nacional, la tendencia es de más de 100.000 casos por día.
En su comparecencia semanal correspondiente al martes 10 de noviembre el gobernador John Carney dijo que a medida que entra el invierno hará más frío y la gente pasará más tiempo en espacios interiores con familiares y amigos. A medida que se acerca el Día de Acción de Gracias, el gobernador señaló que la gente debe comprender los riesgos.
“Hoy estamos en un punto de inflexión en el que tenemos que tomar decisiones”, dijo el gobernador Carney.
La División de Salud Pública de Delaware está considerando algunas restricciones nuevas y estudiando lo que están haciendo otros estados. La directora de salud pública, Dr. Karyl Rattay, dijo que podría haber una nueva pauta respecto a la cantidad de personas en reuniones públicas y privadas, toques de queda, deportes y requisitos de mascarillas faciales.
“No queremos tener que cerrar escuelas nuevamente y tener un impacto adicional en la economía”, dijo.
La gente que cena junta es una de las mayores preocupaciones, dijo Dr. Rattay.
Para el gobernador Carney, las actividades en interiores no estructuradas, como los amigos que se reúnen para ver fútbol y compartir pizza, son fuente de graves preocupaciones respecto a la propagación del virus.
No describió las restricciones específicas que se están considerando, pero dijo que quería que los habitantes de Delaware no se relajasen porque se han cansado de las precauciones.
“No podemos permitir que esto vuelva a descontrolarse”, dijo el gobernador Carney.
El lunes 9 de noviembre el presidente electo Biden comenzaba a prepararnos para el invierno que se avecina al decir en su comparecencia en Wilmington que “Todavía nos enfrentamos a un invierno oscuro”.
