A few years ago, I woke up twice in the middle of the night because I sensed the Holy Spirit pointing to my head (touched on my forehead) and again I sensed the Holy Spirit pointing to my heart (touched on my chest). Immediately I thought, ‘I’m being told to consider these two together: ‘MIND and HEART’. Half asleep, I wrote a note to myself to ponder in the morning. During my study time, this scripture came to me: “For this is the covenant that I will make with the house of Israel after those days, says the Lord: I will put MY LAWS in their MINDS and write them on their HEARTS; and I will be their God and they shall be MY people.
I am reminded of this message today because it is the season when many commemorate the passion of the Christ, the sacrifice that brought the power as grace to restore minds. Jesus said, “But I, when I am lifted up from the earth, will draw all men to myself.” Jesus also kept His promise to send the Holy Spirit with additional grace to heal with fire and thus convert the hearts completely to God.
While observing this special time of remembrance, I pray that we may grow in the grace and knowledge of Christ to transform the core of our being, integrate these divine graces into our hearts, and experience the new earth, the new creation, and the new creature. Then will we be truly fitly joined together into His Body.
We live in the midst of a world full of confusion; but, God shall bring forth the headstone with clamor ‘GRACE, GRACE unto it.’ Confirming by saying it twice that the first grace is to restore our thoughts; and, the second grace to heal our hearts. Then He will be our God and we shall be His holy people.
(Study scriptures: Heb. 8:10; Heb. 10:16; Jer. 31:33; John 3:14; John 12:31; Eph. 4:16; Zech. 4:7)
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Algunos años atrás, desperté dos veces en medio de la noche porque tenía la sensación del Espíritu Santo que apuntaba hacia mi cabeza (lo sentí en mi frente) y otra vez la sensación del Espíritu Santo que apuntaba hacia mi corazón (lo sentí en mi pecho). De inmediato pensé ‘Me está diciendo que considere estos dos juntos: ‘MENTE y CORAZÓN’. Medio dormida, escribí en mi libreta para reflexionar en la mañana. Durante mi tiempo de estudio, vino a mi esta escritura: “Por lo cual, éste es el pacto que haré con la casa de Israel. Después de aquellos días, dice el Señor: Pondré mis leyes en la mente de ellos, y sobre su corazón las escribiré; y seré a ellos por Dios, y ellos me serán a mí por pueblo;
Recordé el mensaje hoy porque es éste el tiempo cuando muchos conmemoran la pasión de Cristo, el sacrificio que trajo poder como gracia para restaurar mentes. Jesús dijo “Y yo, si fuere levantado de la tierra, a todos atraeré a mí mismo.” Jesús también cumplió su promesa de enviar al Espíritu Santo con gracia adicional para sanar con fuego y así convertir los corazones hacia Dios completamente.
Mientras se observa este tiempo especial del año, es mi oración que podamos crecer en la gracia y conocimiento de Cristo para transformar la parte central de nuestros seres, integrar las gracias divinas dentro de nuestros corazones y experimentar en esencia la nueva tierra, la nueva creación, y la nueva criatura. Entonces estaremos verdaderamente concertados y unidos en Su Cuerpo.
Vivimos en medio de un mundo lleno de confusión; mas, Dios traerá hacia adelante la piedra angular con clamores: GRACIA, GRACIA a ella. Confirmando al decirlo dos veces que la primera gracia es para renovar nuestros pensamientos; y, la segunda gracia para sanar nuestros corazones. Entonces será Dios nuestro Padre y nosotros su hijos santos.
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