Volkswagen Eos

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El Grupo VW está constituido por nueve marcas procedentes de siete países europeos: Volkswagen, Audi, SEAT, Škoda, Volkswagen Vehículos Comerciales, Bentley, Bugatti, Lamborghini y Scania.

El mismo opera en 61 plantas de producción en quince países europeos y en más de seis países en América, Asia y África, contando alrededor del mundo con unos 370,000 empleados produciendo unos 26,000 vehículos o involucrados en servicios relacionados con los productos del Grupo.

Volkswagen es el mayor fabricante de automóviles de Europa y vende sus vehículos en más de 153 países.

El nombre Volkswagen se debe a que en los años 1930 surgió en Alemania el proyecto de construir un automóvil que fuese accesible para un gran número de personas. En esa epoca se llamo a concurso a los empresarios para la concesión de la fabricación del denominado ‘automóvil del pueblo’ (Volks Wagen).

Ferdinand Porsche fue el encargado de llevar a cabo el proyecto cuyo fin era construir un vehículo sencillo y barato que pudiese estar al alcance de la mayoría de los alemanes. El nombre escogido para el automóvil fue Kdf-Wagen (Kraft durch Freude: ‘fuerza a través de la alegría’) y la ciudad, Kdf-Stadt. Sin embargo, ni en la fábrica ni en toda Alemania nadie empleó otro nombre que no fuese el de Volkswagen para referirse al Escarabajo (el primer y exitoso carro). El nombre Kdf-Wagen sólo fue utilizado en los catálogos y por los militares.

Vayamos al Eos. Hace años, cuando los descapotables contaban con techo de lona, su utilización estaba muy limitada ya que eran poco prácticos y, salvo excepciones, su adquisición y mantenimiento suponían un elevado desembolso de dinero. La aparición del Mercedes SLK con su techo metálico automático abrió un camino que siguió marcas generalistas capaces de ofrecer productos atractivos a precios más asequibles que el de la firma de la estrella. Cierto es que para los puristas, los descapotables deben mantener el techo de lona y carecer de barras de protección de cabeza para no afear el conjunto. Este planteamiento, vigente en carros actuales como el primo hermano y rival del Eos, el Audi A3 Cabriolet, es básicamente por la ligereza de peso y un centro de gravedad más bajo que supone un techo flexible, lo que repercute positivamente en la agilidad dinámica.

Los de última generación, como el Eos, añaden la funcionalidad de sus cuatro plazas y maletero con un techo metálico plegable automáticamente y con cristal capaz de transformarlo, fácil y rápidamente, en cupé, cabrio o cupé con techo corredizo. Un caza miradas para todo el año que, con el motor 2.0 TDi de 140 caballos y cambio DSG de 6 velocidades, muy fácil de conducir, y que nunca reacciona de manera brusca. Los virajes se pueden hacer muy rápidos con gran capacidad de tracción y los apoyos en fuertes retenciones son bastante neutros con cierta tendencia a que la trasera deslice algo a poco que ahuequemos el pedal del acelerador. La suspensión que combina la estructura del Golf en el eje delantero, aunque algo más firme y rebajada, con el sistema multibrazo trasero del Passat, de contrastada eficacia. Tanto el control de estabilidad como el de tracción actúan relativamente tarde, dejando cierto margen de maniobra al conductor. También la frenada es buena, tanto con las ruedas rectas como en curva, gracias a la reducción de inercias y transferencias de peso que aporta la amortiguación adaptativa.

El techo del Eos es una de sus partes fundamentales. Desarrollado por el especialista Webasto, la firma alemana lo denomina CSC –coupé, solar y cabrio–. Está formado por numerosas piezas agrupadas en cinco principales. La parte superior está compuesta por dos cristales amplios que forman un techo panorámico que aporta luminosidad y frescura cuando se viaja con el techo completamente cerrado. El cristal delantero es cromático y se puede desplegar hacia atrás de manera automática con sólo pulsar una tecla para conseguir un hueco abierto sobre las cabezas del conductor y su acompañante.

Con esta configuración el Eos se transforma en un cupé con techo corredizo. Para descapotarlo por completo hay que pulsar otra tecla cercana a la anterior, mantener el carro completamente parado y que el sensor de aparcamiento no detecte obstáculos en un radio de 20 pulgadas ya que la tapa del maletero tira hacia atrás. Durante el proceso se repliegan los dos arcos y los cristales que cubren la distancia entre el parabrisas y la parte posterior, a la vez que la tapa del maletero se abre para hacer hueco a todo el conjunto.

Como elemento de seguridad pasiva se encuentra un sistema de protección antivuelco, tomado del New Beetle Cabriolet, conformado por dos dispositivos que emergen automáticamente de la parte posterior de los reposacabezas traseros en menos de 0.25 segundos cuando el vehículo ha superado un cierto valor de aceleración transversal o una determinada inclinación máxima admisible.

Dentro del carro se percibe claramente la herencia del Golf V y Jetta, así como la calidad de los materiales utilizados, su buen ajuste y sensación de solidez. La disposición de los elementos en el salpicadero es muy similar al del Golf y Jetta, con algunas piezas idénticas, como la que separa los asientos delanteros o la consola central, o el clásico cuadro de instrumentos de la marca, con grandes relojes para el velocímetro y cuentavueltas, indicadores gráficos de fácil lectura y la impactante pero poco práctica iluminación en azul.

Los asientos delanteros son de tipo deportivo, regulables eléctricamente, con calefaccion –detalle muy importante en un descapotable– y con apoyo lumbar. Resultan muy cómodos y agarran bien lateralmente, lo que garantiza viajes largos sin molestias. En la zona de atrás hay espacio justo para las piernas y las cabezas de los ocupantes.

Cuenta también con faros autodireccionables y regulables en alcance. Trae conexión para reproductores de música iPod, radio CD con ocho altavoces, climatizador bizona, espejo retrovisor interior fotosensible, sensor de lluvia, control de distancia de aparcamiento y el Multimedia Device Interface, para el manejo de todo lo relacionado con el entretenimiento, entre otros, con conexión USB.

El sistema DCC de amortiguación deportiva viene con sus tres modos de actuación –normal, confort y sport–, seleccionables a voluntad del conductor, aporta comodidad en los dos primeros modos y dinamismo en sport.

Encuadrado en un nicho del mercado, el Volkswagen Eos aporta funcionalidad para el día a día sin renunciar al placer de conducir una cupé descapotable. Una opción para jóvenes que les gusta el aire fresco.

Precio sugerido: desde US$ 33,995

Consumo: 22 mpg ciudad /30 mpg carretera